La época navideña suele evocarnos la imagen de reuniones con la familia, gestos de cariño con las personas que nos rodean, conectar con otras que hace mucho que no vemos, buenos deseos para el siguiente año, etc. Emociones como la alegría y el amor suelen ser lo que socialmente asociamos a este momento del año.
Pero, ¿qué pasa cuando esto no es así? ¿qué ocurre cuando hay conflictos familiares sin resolver? ¿cuando hemos perdido a un ser querido y no tenemos ganas de celebración? Muchas personas que, sea por el motivo que sea, no esperan estos días de fiesta con emociones agradables, pueden llegar a sufrir por no estar dentro de esta norma social .
Vamos a tratar (siempre desde el respeto y entendiendo que cada persona tiene una situación específica) de darte algunas recomendaciones que quizás puedan servirte a la hora de enfrentarte a estas fiestas:
- Límites. Lo sabemos, la familia o las reuniones sociales navideñas son escenarios retadores a la hora de poner límites y priorizarse. Por ejemplo: decir que no a la cena del curro si no te apetece este año, no responder a preguntas invasivas por parte de algún miembro de la familia, no permitir que haya conductas inapropiadas delante de ti, no hablar de algo si no quiero hacerlo, no comer más si no quiero hacerlo, etc. Te proponemos que primero establezcas tus límites y pruebes a intentar poner alguno en marcha (aunque sea algo que tú consideres ‘pequeño’, empieza por ahí). Esto te ayudará a sentir que puedes hacerlo y te sentirás bien con ello, lo cual, es una sensación que ‘engancha’.
- Valida tus emociones en la medida que puedas. Sabemos que esto a veces es un trabajo difícil, pero la realidad es que es normal que sientas cosas diferentes en esta época, y está bien. No querer salir en Nochevieja no te hace aburridx, quizás es lo que necesitas para estar lo mejor posible esa noche. No querer ver a tus padres estas fechas no te hace mal hijx, quizás es lo mejor que puedes hacer por ti este año. Estar especialmente triste en esta época no es malo, quizás necesitas conectar con esa emocion que te dice lo mucho que echas de menos algo o a alguien que no está y que apreciabas.
- Si lo necesitas, intenta tener espacio para ti, buscar ratitos donde puedas estar solx. Tómate los descansos que necesites en estos días, tanto si eres una persona más introvertida y el socializar es un gran esfuerzo como si sientes cierto rechazo en este momento de tu vida hacia tu familia. Es normal que si la relación con ellxs es difícil, no tengas demasiadas ganas de pasar todos los días de celebración a su lado y, además, no tienes por qué hacerlo.
Así que recuerda: priorizarse y pensar en lo que más te puede ayudar a estar bien, no es algo egoísta sino de amor propio. Lo mejor que puedes hacer por ti, es mimarte en estas fechas.